No resoples.



No resoples. Resoplar es incrementar tu sentimiento de frustracion, externalizarlo, contagiarlo al resto.

Cada vez que vayas a resoplar, pará. Canaliza esa energía con una enorme sonrisa, levantando los ojos al cielo, tomando aire por la nariz y cargando completamente tus pulmones.

Contá hasta diez.

Soltá ese aire muy despacio, casi como si nadie se diera cuenta que lo estás haciendo. No dejes de sonreir, hasta que termine de salir todo el aire que tomaste.

Después me contás.

Comentarios

Publicar un comentario